El cuarto trabajo de Neumark lleva como título Opus Four, una colección de solos de piano donde predomina un tempo afectuoso en unas melodías íntimas y románticas nacidas de momentos y emociones vividas por el pianista. Neumark nos ofrece una hora de relajación y disfrute, mientras su música realiza la tarea de perfilarnos un ambiente natural y placentero, consiguiendo que nuestro momento sea único y aislado del mundo.
La primera pieza es emotiva, y a pesar de su lentitud, sus notas difunden esperanza y armonía. “With Wonder” es una de las piezas más bellas de Opus Four. Hay músicas que consiguen cambiar el estado de ánimo; ésta es una de ellas.
Continuando con la bella conjunción de notas, Tim interpreta “Dad’s Victory”, otra de las composiciones a destacar en este álbum. “Dad’s Victory” es poseedora de una de las melodías más emotivas y sinceras de todo el CD. Una pieza escrita y dedicada al padre de Tim, superviviente del cáncer.
Un mimado baile de notas hace aparición. “Waltz in F Minor” es otra delicatessen del álbum. El Waltz tiene un sentimiento poderoso, acentuado por el toque que el pianista ofrece a las teclas del piano. Bellísima!. El comienzo de Opus Four no podría ser mejor.
“Father of the Bride” nace en la zona alta del piano, ofreciéndole a la composición un toque de ternura. Entrañable composición.
Imaginaos el carácter de “A Moment of Joy”, notas atiborradas de alegría y una gracia en la melodía que eleva el ánimo. Arranca una sonrisa fugaz en el oyente!.
Una noche de Febrero nació “Winter Dreams”, un nuevo villancico que baña con un resplandor los momentos más bellos de la Navidad.
Una de las grandes composiciones de Opus Four es sin duda, “Persian Rhapsody”, una música agridulce, donde el pianista hace hincapié en las notas negras, dejando que la melodía tome un carácter agrio en algunos fragmentos, pero con una música fantástica. Interesante pieza!.
El momento en el que un padre ve por primera vez a un hijo ya tiene música, “Two Hearts”. Tim abre su corazón y deja que la música fluya, creando una hermosa melodía que refleja perfectamente el momento. Magnífico!.
“Finding Hope” es la música perfecta para el sosiego. Casi inapreciables golpes de acordes y unas notas tocadas con un mimo extremo se unen para dar vida a una composición que es la quintaesencia de la paz, la relajación más absoluta.
Otra pieza interesante de Opus Four es desconsolada “Adagio Sostenuto”, cuya música es un constante lamento; un dolor que nace entre las manos de Neumark. Pieza destacable en este álbum!. Asombrosa.
“Seattle Nocturne” es la continuación de la pieza anterior. Escrita en su estancia en Seattle mientras grababa este mismo álbum. Las notas sugieren soledad, aflicción. Un momento íntimo para dejar libre los pensamientos.
En su álbum debut ya disfrutamos de un momento de “Meditation”, en esta ocasión es “Meditation: Skipping Stones”. Al igual que en su primer trabajo, esta pieza es dulce, apacible, liberadora… Una delicia.
La pieza más intensa y efusiva de todo el álbum es la que cierra el CD. “Chasing Glory”, una música que captura el momento emocionante de una competición. Un final espléndido para Opus Four.
Opus Four contiene la música perfecta para disfrutar de una buena lectura, o simplemente sentarse frente a la visión de la naturaleza y reflexionar. Con una hora de música, Tim Neumark refleja sensaciones y vivencias a golpe de piano, confiriendo al instrumento las mismas emociones que él llegó a sentir en aquellos momentos, una manera de hacer que el oyente sienta cada melodía como suya. Opus Four está disponible en:
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16/07/13