Steve Bowe
2011
52.3 minutos
Después de haber lanzado algunos singles y un primer álbum, el compositor, productor y multiinstrumentista Steve Bowe lanza al mercado Soundscapes, un álbum donde la música electrónica experimental adquiere un significado propio. Nos encontramos ante un trabajo lleno de sentido, en el que los instrumentos (guitarras, teclados, sintetizadores) crean melodías ante un fondo electrónico total, convirtiéndose en un interesante balcón donde se aprecia un horizonte lleno de posibilidades sonoras e interesantes y sorprendentes melodías. Steve aprovecha al máximo las bases, los sintetizadores y su don con la guitarra y el teclado para hacer que el oyente desee escuchar y disfrutar la próxima pieza.
La combinación de un sintetizador pegadizo, profundas voces y un ritmo sutil son las claves para atrapar al oyente y por supuesto, el encanto de “Prayers”. “Prayers” se eleva a todo lo lato cuando Bowe se presenta con su guitarra eléctrica, una emocionante y prodigiosa entrada. Impresionante comienzo!.
Rápida y apasionante es “Queen of the Nile”, donde el psicodélico teclado y el ritmo son incesantes bajo algunas voces femeninas que surgen junto al sonido de un instrumento de aires orientales. “Queen of the Nile” es una de esas músicas que levantan el ánimo al cualquiera; Bowe ha encontrado la melodía perfecta. Brutal!.
Una de mis preferidas es «After the Storm», una pieza que recuerda a la música de otro artista revisado en Reviews New Age, David Mauk. Con un entrañable sonido y una melodía alegre y suave, Bowe toca el piano y los teclados creando un sentimiento dulce. Lo mejor de esta pieza es la viveza que posee, con el paso del tiempo se van añadiendo nuevos instrumentos, que sin varia la melodía, le añaden más sentimiento a la misma. Bellísima!.
La parte más discotequera de Steve aparece con “Orpheus”, donde nuevamente el artista acude a voces penetrantes, melodías pegadizas y a un tempo vertiginoso. Lo sorprendente de la pieza es el sinfín de sonidos electrónicos que van aflorando al ritmo de la música, además de su guitarra eléctrica, que aparece en contadas ocasiones. Una música perfecta para televisión. Qué vida!.
Como ambientado en un café de los 60 en París, Steve compone «Île de la Cité». Con un acordeón como instrumento predominante, la música es un bellísimo y sentido baile, en la que el artista rompe por completo con lo escuchado anteriormente, un regalo para los oídos sin lugar a dudas. El juego de cuerdas es fabuloso y la composición es sencillamente perfecta, capaz de despertar bellos sentimientos. Chapeau Maestro Bowe!.
Otra de las grandes sorpresas de Soundscapes es «The Return of Jack Tar», una pieza con aires de folklore Irlandés, por lo que ya podemos imaginar el optimismo y el júbilo que desprenden sus notas. El teclado reproduciendo el sonido típico de instrumentos irlandeses, la guitarra eléctrica para ofrecerle fuerza al tema y el juguetón y descarado ritmo de la música invitan a un baile alegre.
“Iceman” fue uno de los singles que Bowe compuso y que ha decidido incluir en Soundscapes. A este track le falta la rapidez melódica a la que nos ha acostumbrado el artista con sus temas anteriores. Aunque posee grandes instrumentos, el violín como protagonista por ejemplo, existen algunos sonidos o instrumentos que se podrían prescindir, como la voz masculina. Por otra parte, la guitarra sigue siendo su seña de identidad, es impresionante su toque!.
Otra de las favoritas es “Caledonia”. Mezclando una dulce música con una base aplacada de percusiones, Steve ha encontrado un punto intermedio entre la música celta y la electrónica. En “Caledonia” podemos disfrutar de instrumentos de vientos como la gaita o la flauta, sonidos que le dan a la pieza un maravilloso toque de dulzura. Me gusta esta pieza, en algunos instantes, poderosa!.
Regresando al sonido electrificante de Bowe, este nos vuelve a sorprender. Como ya hemos estado viendo, la magia de Steve a la hora de unir música electrónica con otros estilos o instrumentos es magistral, en esta ocasión la unión es más fuerte. El canto de unas poderosas voces de canto clásico junto a un piano mantienen al oyente con la boca abierta.
“Rat Race” es personalmente la pieza menos interesante del álbum. Aunque la música es atractiva, la voz de un hombre incita a continuar “trabajando”, algo que se repite constantemente desviando la atención hacia esta. La voz sobra, la música… Perfecta!.
Una entrada bélica para “Somme”, donde Bowe se apoya en unas voces sintetizadas y el sonido de un órgano para interpretar una pieza más suave que las anteriores. En este caso, no existen bases rápidas y electrónicas, de hecho, es la composición más relajada de todo el álbum.
Para finalizar, Steve nos regala “Farewell”, otra pieza a destacar en Soundscapes. En esta última pieza, el instrumento protagonista es la voz sintetizada de una mujer y un piano, ambos se alternan los papeles para interpretar la melodía principal. Un final suave para Soundscapes, un final perfecto para dejar un buen sabor de boca al oyente.
Soundscapes es uno de los mejores trabajos de música electrónica revisados en Reviews New Age, podemos encontrar entre las doce piezas que componen el álbum, ocho o nueve muy interesantes. Steve Bowe ha demostrado que una música electrónica de bases rápidas no tiene por que ser incoherente y estridente, entre cientos de sonidos y sintetizadores electrónicos, Bowe sabe elegir el sonido adecuado y la melodía perfecta para mantener al oyente expectante. Soundscapes es un álbum que sabrá captar tu atención en todo momento!.
reviewsnewage.com
10/03/12