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Tras su álbum debut «Journey of Soul», el pianista John Paris lanza su segundo trabajo, Reflections, un interesante CD donde el piano no acierta a establecerse en un género concreto. Jazz y New Age se encuentran para sorprender al oyente, una asociación que llama la atención por su riqueza técnica y por los momentos en los que el Jazz hace su fugaz aparición con la intención de quedarse, pero es el género New Age el que prevalece en todo momento con su toque romántico y la dulzura que lo caracteriza. Merece especial mención los estudios donde ha sido grabado este álbum, Piano Haven Studio, supervisado por el ingeniero y también pianista, Joe Bongiorno, por lo que Reflections no sólo nos regala buenos minutos de fantástico piano, la calidad sonora que podemos notar en este álbum es asombrosa.
El tema que abre el álbum es el mismo que le da nombre a este. “Reflections” es un suspiro, notas que vienen y van, que se acercan y se alejan mostrando el camino a la tranquilidad y a la paz. Con brevísimos fragmentos incursando en el Jazz, la pieza no deja en ningún momento de acariciar el estilo New Age con una magistral destreza y pasión. Mi preferida!.
Inofensiva nostalgia es “Lonely Raindrop”. Su serena melodía pasa como si nada, sin perturbar, con delicadeza. Es una de esas piezas que invitan a recordar emotivos momentos. Una de las composiciones de Reflections que engrandecen este álbum. Una música creada para soñar.
Aparece la fuerza y la revelación de técnica. “Cold Winter Night” es variada en cuanto a su melodía, sin seguir un patrón está rompe los tiempos con una soltura increíble y John nos muestra un toque maestro al piano. “Cold Winter Night” cambia por completo su carácter a puro e improvisado Jazz en mitad de la pieza, un cambio brutal pero muy sorprendente.
“Lately Been Wondering”. Un tema donde parece que la improvisación es parte predominante en la pieza. Sin ser rápida, un tempo muy marcado de los acordes bajos, sirven de guía a la sencillez que dibujan las notas de la mano derecha. Apacible composición.
John continúa concediéndonos minutos llenos de melancolía. “Lady Moon” es una pieza escrita en la noche con una pasión desgarradora, cuyos acordes escriben lágrimas y el dolor se transcribe en las notas. Otra de las grandes composiciones de Reflections.
Vuelve la alegría con “Joyful Heart”. Hasta el momento es la pieza con más agarre de todas, con un brillo y una técnica estupenda. Un tema que anima y da alas después de las dos últimas composiciones. Otra melodía que encierra una magistral pericia del pianista!.
El Jazz resurge y con fuerza en “Early Morning”, el track que más se aleja del New Age de Reflections. Sin melodía definida y con la única intención de dejar sin aliento al oyente, Paris esgrima con el teclado acordes y notas imposibles, creando una pieza técnicamente perfecta. Genial!.
“Rollin’” es la pieza que hará vibrar al oyente en Reflections. Rápida, enérgica y con una penetrante y emocionante melodía, Paris ha encontrado el punto exacto en el que la composición y la maestría se topan. “Rollin’” posee la melodía más llamativa, risueña y esperanzadora de todo el álbum. Alucinante!.
“Swan Lake Serenade” como su nombre indica, es una serenata donde Paris cambia el conjunto de cuerdas típico por las del piano, una música romántica y apacible donde la melodía se repite una y otra vez, marcando un delicioso tiempo y ofreciendo un bello sentimiento de apego.
«New Age For A New Age” es quizás la pieza menos atractiva del álbum. Con fragmentos muy improvisados, el pianista se deja llevar entre acordes profundos y algunas notas sin sentidos que nacen de la mano derecha del artista. Una pieza con técnica pero que pasa desapercibida.
Con “In The Country” John vuelve a capturar al oyente con una entrada encantadora y llena de luz. Una pieza que se degenera con el tiempo debido a progresiones incoherentes que rompen el encanto de la pieza, cuando los primeros segundos parecen el comienzo de una gran composición.
El pianista se muestra reservado en “The Journey”, otra de las piezas que atrae toda la belleza para sí. Con dos fragmentos muy bien diferenciados, Paris reproduce una extensa primera parte muy decaída, apenada y con una sensibilidad sobrehumana, dejando el júbilo para minutos antes del final, cambiando el carácter de la composición. Una verdadera maravilla!.
Con más sentido y emoción, el artista reproduce con arrojo “Forever Flowing Waters” y con el ya conocido estilo que el pianista ostenta, este cambia de tonalidades con una facilidad increíble en su piano. Mezclando notas y acordes aparentemente opuestos, John logra que estos cobren cierto sentido en “Forever Flowing Waters”.
Para finalizar, John aplaca los nervios con una de las melodías más dulces y cálidas de Reflections, “Lullaby Of The Eternal Dreamer”. Una música que merece la pena ser escuchada con atención, catando cada segundo y disfrutando con ella. John ha dejado lo mejor para el final, sin duda, el sentimiento que despierta esta pieza es hermoso. Perfecto final Maestro!.
El pianista John Paris nos muestra una nueva forma de disfrutar de la música de piano solo. La alianza creada por el Jazz y el género New Age es algo nuevo e interesante que crea una mezcla que sorprende en cuanto a la técnica y la composición. Reflections consigue despertar el interés del oyente gracias a melodías que contienen en sí mismas diferentes géneros, disfrutando este con un piano melódico con incursiones y destreza de puro Jazz. Reflections es un álbum recomendable, disponible en:
reviewsnewage.com
12/02/12